· Categoría: Miniprebenjamin
· Campo: Bernadette
· Día y Hora: 25 de abril, 18:30
· Resultado: Bernadette 4-6 Internacional Aravaca
· Goles: Iñigo, Santi, Mariano, Marcos
· MVP: Joaquín López
Cuando quieren. Esa es un poco la frase que define el partido aplazado contra el Internacional Aravaca que disputamos en nuestro campo el pasado Martes.

Se veía venir. En el entrenamiento previo al partido nuestros pequeños no estuvieron nada concentrados. Nos ocurrió algo parecido al partido del Unión Aravaca. Partido fuera del horario normal, a las seis y media de la tarde donde los chicos ya son mucho más vulnerables al despiste, etc. Pero no es excusa, las condiciones son iguales para los dos y de hecho demostraron que todo depende de la actitud.

Una primera parte donde no se vio la esencia de un equipo, parecían jugadores individuales que no buscaban la conexión con otros compañeros. Además, el rival vio la puerta abierta de par en par en el descontrol defensivo. Nuestra zaga siempre demasiado adelantada, dejaba a los delanteros rivales con ventaja para hacer daño. De hecho, varios de sus goles fueron fruto de simples pases en largo buscando la espalda de estos defensas. En definitiva, un equipo descolocado, desubicado y desconcentrado. El 5-1 de esta primera mitad era totalmente merecido.

Llegaba el descanso, y estaba claro que peor no se podía hacer. Había que intentar espabilar al equipo, que despertasen, y se dejasen de tonterías. Creo que fue ahí cuando se dieron cuenta de que un equipo al que hace unas semanas habíamos ganado, nos había endosado en una primera parte nada menos que cinco goles. No digo que se creciesen y pensasen que iban a ganar, pero si salieron con otra actitud. Quizá, esa pequeña competitividad sana, eso de que a nadie le gusta perder, pero menos si es por muchos goles.

Salió al campo otro equipo, hacían jugadas, llegaban con peligro, en defensa bien colocados, y ya el gol les hizo venirse arriba. No tenía nada que ver con el Bernadette de la primera parte y en este deporte los goles son autoestima. Llegó un tercero e incluso un cuarto gol que hizo que hasta el equipo contrario se asustase.

La cosa acabó en 4-6, lo medio arreglaron. No sirvió para salvarles la charla de la actitud previa al partido, pero sí para que viesen con más claridad que esto va de actitud, que esto va de querer o no querer, y que cuando quieren… Da igual el rival.